28 de diciembre de 2010

Humos Hosteleros

Lo primero que voy a hacer para que veáis que intento poner rienda a mi parcialidad es aclarar que yo he trabajado en un bar poniendo copas hasta altas horas y he sido fumador 14 maravillosos años de mi vida (esto no me hace viejo, me hace cancerígenamente precoz...), que creo que fumar es una maravilla para el que se lo fuma, que con un cigarro los grandes momentos, alegres o tristes, son mucho más intensos, que correrte y echarte un cigarro es uno de los grandes momentos de la Humanidad, mayor, incluso, que el descubrimiento de la rueda, el fuego o la penicilina (lo siento, Flemming, tía...)... Dicho esto, también he de aclarar que para no dar rienda suelta a mi irasosiá (y sí a mi pedante carácter musical) estoy escuchando unas lecciones de tinieblas de Charpentier, las que tienen en el catálogo el número H.92, que son como lo del polvo y cigarro pero para los oídos y que relajan mucho esa cosa que no existe: el alma.


Y ahora a lo que vamos: la ley antitabaco. Dentro de cinco días, el domingo, no se podrá fumar en ningún lugar, especialmente en bares y restaurantes. Qué queréis que os diga? A mi me parece maravilloso, básicamente porque no dejé de fumar para respirar el humo de los demás y porque mis córneas tienen un límite de aguante (bastante bajo desde que la gente escribe cosas del tipo Ayer *tube que salir, Hoy *e comido muy bien y No encuentro mi *mobil). No puedo decir nada de que además odio que luego me huela el pelo a humo por razones obvias, pero sí por la ropa, que se vuelve radioactiva y desprende olor a tabaco tres días. Comprendo, por otra parte, a los hosteleros, claro, pero su planteamiento tiene un punto de absurdo que ni ellos mismos parecen detectar. Lo primero es que sólo fuma el 30% de la población, que es menos de 1/3, como os habréis dado cuenta (o no, tías)... Los hosteleros se quejan mucho de que se ha incluido a niños y viejos en la encuesta y que no es justo... pero claro, eso no exime a estos grupos de comerse el humo de un fumador: no tienen campos de fuerza protectores, vamos.

Luego está la cosa de que no se creen que esto vaya en serio... porque este país es así, de pandereta, y para esto me remito a esta interesante y locuaz entrada de Héctor Desterrado. Más cositas... Entras en un bar y es como entrar en Londres antes del cambio climático (o sea, con nieblas), y ves a decenas de personas a los que parecen que pagan por fumar! Sobre todo son tías, las pobres,... que a quién se le ocurre hacer las mismas estupideces que los hombres!? Y es aquí donde quería llegar, a la humareda interior. Los bares, pubes y discotecas tienen la obligación (legal, no moral) de tener extractores de humos. Su funcionamiento es simple: absorben humos y entra aire limpio, pero claro... si extraes el aire que sobra y que está calentito, tienes que volver a calentar el aire nuevo, que suele venir de la calle y que en invierno está gélido, así que tienes que poner el aire acondicionado, que también tienen casi todos... En resumen, extraen el humo, limpian el aire y lo calientan y todos felices... pero... pero... todos sabemos que esto no ocurre jamás! Si así fuera en los bares no habría humos...

Solución al misterio: extraer humo, meter aire nuevo y calentarlo es sencillo, pero te deja una facturita de Iberdrola (o similar) que no veas, es muy caro, así que lo que hacen es apagar el extractor y poner el aire acondicionado a tope para que parezca que corre el aire y así te chupas tú el humo y bien fresquito para que no te des casi cuenta... y luego ya extraes tú toda la mierda llevándotela en los pulmones.

Lo mejor de todo es que encima tienen la desfachatez de decirte que si la copa te vale 10 ó 12 euros es porque no sólo pagas el alcohol, sino el servicio (camareros muy estupiditos si vas por Chueca, sobre todo en el bar del Oscar que no me acuerdo ni cómo se llama), los baños (siempre sucios por lo general), o la limpieza (cof, cof...)... vamos, que nos toman el pelo incluso a los que no lo tenemos. Ahora sí, hosteleros, os lo habéis buscado vosotros... pensad que cuando ponéis cartelitos en vuestros bares de "los hosteleros decimos NO a la ley antitabaco!" pensad que los clientes decimos SI, que no queremos tabaco, y punto, y si os empeñáis en hacer la vista gorda voy a hincharme a pedir hojas de reclamaciones no sólo por el tabaco, sino por los baños sucios, los camareros estúpidos y el garrafón que muchas veces nos metéis a precio de oro.

(Conste que todo esto es una generalización. Hay hosteleros, pocos, la verdad, muy profesionales que saben llevar su negocio en condiciones y respetando al cliente)

9 comentarios:

  1. Si señor, ole, ole y ole, yo también voy a poner más reclamaciones que pelos en el culo tenga el hostelero, ea.

    ResponderEliminar
  2. Siempre he sido un poco tolerante porque no me importa que alguien fume al lado si estamos en la calle (siempre que tampoco esté rodeado y asfixiado). Ahora me alegro un montón que por fin llegue a los locales, estaba harto de llegar oliendo a tabaco. No hablo ya de los hosteleros y los servicios porque eso es de traca y daría para una serie.

    ResponderEliminar
  3. Yo estoy convencido de que en Madrid nuestra siempre bien amada Espe sacará algún tipo de ley contra la prohibición, la muy perra. Pero bueno, a ver qué pasa. Yo tampoco creía en 2005 que la gente fuese a dejar de fumar en el curro y...

    ResponderEliminar
  4. Menos mal que al final lo has arreglado y has dicho que no todos estamos en el mismo saco que iba ya a lanzarte los perros :-p

    Un par de puntualizaciones. Yo sí pongo el extractor, de hecho no lo apago en todo el día y, en serio,a veces no da abasto, ni habiéndole subido la potencia del motor, ni habiendo colocado un segundo motor. Ten en cuenta que intervienen varios factores, pero es que lo del humo del tabaco funciona con sus leyes propias o algo chico!
    En cuanto a lo de la ley, yo estoy a favor, por supuesto. No veas cómo lo voy a agradecer, que yo no fumo, y desde que tengo la cafetería hace 5 años parezco un abuelo, todo el día tosiendo, y si me resfrío no te digo ná!!! Lo dicho, un abuelo de 80 años y que lleve toda la vida fumando no tiene la misma tos que tengo yo. Pero, lo que me jode, es que hagan las cosas mal hechas. Ya lo hicieron en el 2006 y lo vuelven a hacer ahora. Que por qué? Porque son unos chapuzas y porque establecen privilegios y agravios comparativos. Si no se puede fumar, que no se fume, pero en ningún sitio!!! A santo de qué viene que se pueda fumar en las terrazas? Es que en las terrazas no hay niños? En los parques no se puede y en las terrazas de los bares sí? Me lo expliquen ...
    Y, por último, yo tengo varios clientes y varios amigos que no son fumadores y, que ahora, podrán venir tranquilos a tomarse un café, una infusión o a ver alguno de los espectáculos ... pero desgraciadamente, yo no vivo de esos clientes. Los que me proporcionan ingresos para poder pagar mis facturas son los fumadores, y eso es así. No digo que sea tu caso, ni el de todo el mundo, pero en general, los no fumadores no consumen igual que los fumadores, chico, al menos es la realidad de mi negocio.

    Que todo esto al final quedará en nada, y todo el mundo se acostumbrará y todas esas cosas? Sin duda. Pero que España es un país de "chichinabo"? También.
    :-)

    Ah, que estoy buscando las lecciones ésas y no las encuentro, y que me he quedado con las ganas de escucharlas, por lo del orgasmo y eso que comentabas, que ya sabes que estoy faltico ... a ver si tengo un hueco y las busco mejor.
    :-)

    Besicos!

    ResponderEliminar
  5. Yo antes fumaba bastante, pero desde que me mudé a Frozenville solo me fumo un cigarrito al día, después de comer y tomando el café (fuera de casa), y casi lo hago por pose, la verdad.
    Y no nos engañemos, como bien dices fumar es un placer pero un mal hábito. Yo añoro los años en que salía de copas y fumaba como una Mila Ximenez cualquiera. De hecho, a la persona más importante de mi vida la conocí gracias al manido ¿tienes un cigarro?. (No, no fui yo el que preguntaba).
    Yo estoy un poco luxaurumbuque, creo que se está magnificando el asunto. En muchos países europeos ya no se puede fumar en bares desde hace años (Italia, Holanda...) y la verdad es que es mucho más agradable respirar aire libre de humos, incluso en discotecas. Aunque eso no quiere decir que vaya a oler mejor, ni mucho menos.
    También coincido en que la ley es un poco hipócrita. Y el concepto de "clubes de fumadores" me parece, además de petardo por decimonónico, una descarada válvula de escape para reconducir los negocios.
    En fin, ya se verá.
    Gracias por las alusiones. !)

    ResponderEliminar
  6. Al hilo del comentario de Héctor tengo que comentar que, según la ley, es imposible postular la creación de clubes de fumadores como salida a los negocios de hostelería. La ley especifica que a los clubes de fumadores solo podrán acceder los miembros asociados, acreditados como tal, no podrán tener ánimo de lucro, por tanto no podrán vender ni expender bebidas ni comidas ni otros artículos ... vamos, que no se podrán enmascarar un bar o cafetería o restaurante como un "club de fumadores" ... es que nosotros lo estuvimos pensando como solución para nuestro negocio, y ya te digo que no es viable.

    Saludos! :-)

    ResponderEliminar
  7. Gracias por la aclaración, Luxuarumbuque. Pues no entiendo entonces qué son los clubes de fumadores esos, porque lo de mantener un negocio para que la gente fume sin ánimo de lucro... No me hago a la idea. Voy a pensarlo un rato.

    ResponderEliminar
  8. Pues eso, un club, una asociación de fumadores, no un bar cafetería o similar, es decir, no un negocio
    :-)

    ResponderEliminar

Aunque ya no se lleva nada, puede comentar después de la señal, por favor. Le contestaré lo antes posible. O no. Gracias.
Piiiiip

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.

LEAMOS, AMIGAS