Sí, Roma es amor y si no habéis ido, tenéis que ir, como yo que, como ya dije en la anterior posta, fui la semana pasada.
Siempre había pensado que para ciudad, París. Grande, amplia, abierta, con una arquitectura imperial. Lo malo son los parisinos en sí, pero bueno... bien vale una misa, como dijo el otro. Curiosamente, Roma supera a París, primero porque está más viva y, segundo, porque se le nota ese rancio abolengo latino, vaticano y renacentista que sólo una metrópoli de 2700 años puede tener. Palacios, iglesias, ruinas, edificios que llevan en pie desde 2000 hasta 500 años, das una patada y te aparece un foro, te tiras un pedo y sale un mosaico... Lo de Roma es muy fuerte.
Lo de viva tiene su cosa buena y su cosa mala. Demasiado tráfico y demasiado turista, pero sobre todo lo primero. ¿Cómo es posible que haya tal cantidad de tráfico por el centro mismo de la ciudad?¿Y tantísima contaminación? Incluso llegué a comprender a Ana Botella, oye... si Madrid no está tan contaminado.