19 de noviembre de 2010

Los Miserables, Madrid 2010

Entre tanto marica y filomarica y gente con buen gusto, no me cabe duda alguna de que todos sabréis que ayer por la noche se estrenó el célebre musical, basado en la obra homónima de Víctor Hugo, Los Miserables en teatro Lope de Vega de Madrid, en plena Gran Vía...

El pasado viernes tuve la oportunidad de asistir al preestreno, que es algo parecido a lo que en ópera se llama ensayo general, sin ser esto tal cosa. Por lo general, esa función está destinada a familiares y amigos y a personal técnico y a ver cómo es el resultado final previo al estreno y no suele estar abierta al público general, salvo en esta ocasión en la que, muy inteligentemente por parte de la producción, se pusieron a la venta entradas.

El cartel del 92...

Yo soy muy mucho más de ópera que de musical, pero a los musicales voy sin prejuicio y a pasarlo bien, claro, como a la ópera, al cine o al teatro. El caso es que había oído mil veces hablar de la obra y tenía ganas de verla sabiendo cómo se hacen los musicales en España. Generalmente, tanto en Broadway como en el West End los cantantes que participan en los musicales son buenísimos cantantes con una técnica lírica pero con un estilo de musical... vamos, que no suena a ópera. Además, se canta con micrófono, así que no tienen necesidad de ponerse a hacer esfuerzo alguno.


El montaje, que ya estuvo en Madrid hace casi 20 años, con Plácido Domingo como productor, es básicamente el mismo del resto del planeta: colorista, efectivo, práctico y muy dinámico, muy bien desarrollado y llevado a cabo por el personal técnico. La iluminación, ídem... Lo otro, lo más creativo, ya es otra cosa... Ante todo diré que es un espectáculo bueno con el que se pasa un buen rato, conste, y ahora es cuando comentaré mis pareceres musicales...


La orquesta, en el foso, está amplificada, para empezar, y el volumen al que suben la música es, muchas veces, excesivo, tanto que a veces te da la impresión de estar en Cool o similar. La orquesta suena bien a pesar de la amplificación, y está muy correctamente dirigida, aunque sin aportar nada... de hecho la dirección musical resulta tremendamente aburrida, tanto en el foso como en el escenario... El elenco vocal no está mal, aunque hay una diferencia de calidad abismal entre ellas y ellos, en beneficio de estos últimos. Fantine (Virginia Carmona), la encargada de cantar el manidísimo I dreamt a dream, no da la talla vocal ni dramática, así, sin más: poco expresiva y con una voz muy justita; su hija, Cosette (Talía del Val), da un poco más la talla que su madre, pero tampoco es que llegue a conmover... aún así, correcta, como Eponine (Lidia Fairen), aunque vocalmente no puede con ciertas partes. Madame Thenardier (Eva Diego) cumple por lo histriónico de su papel a pesar de tener nódulos en las cuerdas vocales (sí, se oyen desde el patio de butacas).


Los hombres están bastante mejor... Intentando ser expresivo, el protagonista, Jean Valjean (Gerónimo Rauch), se pasa y se coloca al límite del grito... pero tiene una voz hermosísima, unos agudos clarísimos y afinados y un falsete que da gusto escuchar... Lo mismo el malvado Javert (Ignasi Vidal), con una voz hermosa, de calidad y superexpresivo y con momentos en los que roba el protagonismo a Valjean. Bravo. Cumple, aunque suena un poco zarzuelero, Thenardier (Enrique R. del Portal); una voz bellísima la de Marius (Guido Agustín Balzaretti), aunque al final de la obra se nota el peso de la función en su voz; Daniel Diges (Enjolras) tiene un voccione increíble, expresivo, amplio y de una calidad nada pequeñita (oh! un juego de palabras!)... juraría que podría cantar perfectamente sin micro y llenaría la sala con facilidad.

El coro tiene voces de calidad, sobre todo por parte de los hombres, pero suena muy abierto y feo, tipo el Money, money de Cabaret, sobre todo cuando sólo cantan las mujeres... no es culpa (del todo) de los coristas, es culpa de la dirección musical.


Después de esta sangría, he de decir que si uno no se fija demasiado en las voces, disfrutará de un espectáculo muy bueno, un gran trabajo en común que da gusto presenciar... pero cuando piensas en el precio de las entradas (de 20 a 70 euros aprox.) te preguntas si no se deberían de haber cuidado estos aspectos vocales más: las cosas hay que hacerlas bien y con calidad en todos los aspectos... Cuando se paga a unos profesionales hay que dejar de lado las buenas intenciones de estos para dar importancia al buen trabajo... Si se lo exigimos a nuestro asesor fiscal con la declaración de hacienda, a nuestro médico de cabecera o al género de nuestro frutero, ¿por qué no hacemos lo mismo con las cosas del arte? Pues, en gran parte, por la ignoracia del público... Si todos escuchásemos la versión de Broadway y del West End primero, la versión española quedaría a un nivel sensiblemente inferior.

Las intenciones están bien para la obra de fin de curso del cole de nuestros hijos y sobrinos, no para un teatro. Id, os gustará.

15 comentarios:

  1. Pensaba ir, pero ya lo vi en Londres hace veinte años y me encanto, asi que me ahorro el chasco no?

    ResponderEliminar
  2. Pues haré una pregunta malvada: los musicales en Broadway salen bien porque la gente es buena y porque hay una tradición y una escuela de este género. Ahora: ¿existe una escuela semejante en España? ¿No serán estos cantantes elegidos lo mejor que han encontrado, un cantante que sepa actuar, bailar y que pueda vocalmente con la parte?

    Trabajo en un teatro donde, si se hacen musicales, se arman las producciones con lo que hay; a veces no se puede pagar al especialista en el género y se le da el papel a la más adecuada del ensamble. Los resultados son similares a los de tu crítica.

    El punto es: supongo que ante lo que había para elegir habrán tenido que hacer concesiones para llevar el espectáculo a puerto. Y que conste que no comparo mi teatro de provincia con un teatro grande en Madrid, pero veo que se repite el esquema de trabajar con lo que se tiene y con lo que se puede.

    En la pregunta de quién podría en España con ese repertorio, si hay formación especializada, quizás esté la respuesta de lo que criticas.
    (y aquí un pequeño elogio - pequeño, que ya te conozco :-)- : me gusta como criticas, se ve que eres del palo y sabes diferenciar entre una cosa y la otra, entre puesta y actuación, entre nivel vocal y sentimiento. Bravo).

    ResponderEliminar
  3. Parece que está de moda eso de vender las entradas del "ensayo general", me lo hicieron hace unos meses en el Price, y la verdad es que la entrada fue más barata, pero se notaba que no terminaba de arrancar...
    Bye bye

    ResponderEliminar
  4. Me gustan las críticas así, críticas. Para panegíricos ya están los carteles y demás anuncios donde se ponen estupendamente. Siempre he tenido la sensación de que el nivel vocal es más bajo que en otros países, tal vez porque como dice Eleuterio no hay una escuela. Aún así, a estas alturas y después de todos estos años con los musicales que se han hecho no me parece excusa. Ganas tengo de verla.

    ResponderEliminar
  5. Vamos, qué calidad de crítica. Directa y con poso, no llena de referencias gandilocuentes como esas ridiculeces de la gente de cine, que se empalagan tanto con lo que escriben que hablan de todo menos de lo que están criticando. Éste me parece maravilloso, todo hay que decirlo.
    Me gustan los musicales. No habiendo tenido oportunidad de disfrutar en vivo de una ópera al completo, la profundidad y las diferencias (exceptuando las obvias), se me escapan. Sin embargo, y aún habiendo visto musicales en la Gran Vía como en Broadway, estoy con Eleuterio en cuanto a que en España no hay tanta tradición con musicales (pero bueno, no miremos atrás, a los tiempos de "Jesucristo Superstar" o "Evita"), pero NO es óbice para que nuestros "artistas" no se encuentren a la altura de lo que se les pide.
    Quiero decir que la formación de un actor debe ser completa, si éste tiene capacidades vocales, pues también darle al canto. Quizá debemos darnos cuenta que el repertorio actoral de nuestro país es terriblemente cortito (a pesar de que hacen mucho ruido y salen en todos los medios), y siempre son los mismos haciendo todo. No hay mucha salida quizá porque no les dejan, quizá porque no interese (no será por obras de teatro o películas subvencionadas.)
    Otto tiene razón en decir que, debido a su precio (lo mismo que en Broadway, por ejemplo) deberían tomarse en cuenta todos los detalles que hacen de un espectáculo eso, un espectáculo. Si hay carestía de medios, pues no intentes compensarla con el precio, que entonces sería una ganancia en bruto para los productores que no se refleja jamás en la calidad de la obra por la que cobran tal dinero.
    Por lo demás, aunque la archifamosa canción me gusta mucho y la encuentro, francamente, muy personal, no iría a ver Los Miserables de entrada, no por nada, sino porque Víctor Hugo me supera con creces. Ahora, si me invitan...¡vamos!

    ResponderEliminar
  6. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  7. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  8. El montaje, (...) es básicamente el mismo del resto del planeta

    Es producción propia o franquicia, pregunto?

    Por curiosidad, más que nada.

    ResponderEliminar
  9. Pues eso, que si en un montaje operístico se exige profesionalidad en uno de un musical también ha de hacerse. ¿Qué pasa, que el público que acude a los musicales no es tan entendido como el que va a la ópera? Pues no sé qué decir, a lo mejor sí, coño. A mí me encantan los musicales y, sin ser yo un experto en técnica, sí tengo mis criterios y, la verdad, un/a actor/triz que no dé la talla vocalmente hablando me puede estropear fácilmente la obra entera. A mi amigo el actor le pasa igual pero en el tema "actoral" y conozco a un técnico de luces que se puede pasar toda una actuación dándote el coñazo con que tal o cual foco está fuera de sitio o yo qué sé ...
    Tengo muchas ganas de ir a ver Los miserables, de hecho, una amiga ha sacado entradas para enero, pero, como siempre no podré ir ...mierdadevida!

    Si al final logro verla ya te contaré qué me parece :-p

    Besicos!

    ResponderEliminar
  10. Esta es una de las muchas razones por las que me gusta tu blog.

    ResponderEliminar
  11. yo que quieres que te diga, paso mil de musicales, me aburro!

    ResponderEliminar
  12. Ay no... Yo la vi en Broadway y me gustó, y paso de decepciones y -¿qué quiere que le diga?- de estafas. No hace Vd. alusión al espacio escénico. Y eso, para mí, es el gran escollo de los musicales en Madrid. Hasta que la Disney decida montar un teatro en España paso de franquicias a medio terminar.
    Por cierto, a mi las entradas del "preestreno" me las ofrecía en "rigurosa exclusiva"... ¡RENFE!

    ResponderEliminar
  13. Yo fui al preestreno tambien, y bueh, soy amigo de uno de los protagonistas, asi que quizas no soy muy imparcial jeje. (bueh, al menos mi amigo salio bien parado en tu critica)

    Debo decir que gran parte de las cosas que decís las comparto totalmente. Creo que las chicas, especialmente Eponine y Fantine, me desilusionaron un poco.

    El musical lo vi en New York y en Londres. De hecho es mi musical favorito. Creo que el espectaculo aca esta muy bien, salvo que el escenario es un poco chico y lo que definitivamente no me gusta es la trducción.

    Creo que estos mismos actores cantando la obra en ingles hubieran hecho una obra digna de Broadway. Pero es que sale el sol en lugar de One day more!! es terrible. Me lastima los oidos.

    ResponderEliminar
  14. Yo también ví la original y esta versión me ha parecido claramente más flojita:
    - A Eponine le faltaba voz ( yo fuí el 1 de enero y el papel lo hacía una sustituta ) y la canción de “Sola yo” ( la más bonita para mi gusto ) quedaba “a medio gas” e interpretada a un tempo demasiado rápido..
    - A Colette niña le faltaba MUCHA voz.
    - El montaje estaba muy bien pero el del Nuevo Apolo de los noventa era más espectacular.
    En lo que estoy muy en desacuerdo es en el cambio de las letras: para mi gusto no ha ganado nada el texto y ya estábamos acostumbrados a las letras antiguas ( que siguen presentes en los CD que se editaron ). La letra nueva me parece hasta un poco “ñoña” en algunos momentos: cambian frases del tipo “la sangre del pueblo de Francia se va a derramar” por otras tipo “la esperanza de un nuevo amanecer”…
    Y me pidieron 9,5 € por unas palomitas y un botellín de agua ( no lo compré, por supuesto… )
    De todas maneras, el que no la haya visto nunca saldrá entusiasmado…

    ResponderEliminar
  15. Yo fui el pasado sábado y me encantó!!
    Las voces son muy bonitas, sobre todo la de Géronimo Rauch que es sencillamente preciosa. y la de Guido también.
    Yo no entiendo mucho de música la verdad, pero me pareció que todos tenían voces excelentes y que cuando cantan coro se les entiende perfectamente. No me importaría en absoluto volver a verla.
    La escenografía está muy bien. Hay muchos efectos especiales que no me esperaba, como el suicidio de Javert.
    He ido a ver varios musicales y este ha sido el mejor de todos ellos.Yo la recomiendo porque es "el musical de los musicales" como dice todo el mundo.

    ResponderEliminar

Aunque ya no se lleva nada, puede comentar después de la señal, por favor. Le contestaré lo antes posible. O no. Gracias.
Piiiiip

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.

LEAMOS, AMIGAS