Ecco pur…

...ch'a voi ritorno.


Ya estoy de vuelta tras mi súbita desaparición… El trabajo, y esas cosas que nos encontramos en la vida que nos detienen la dinámica, no van a poder conmigo, y con el Mariblog menos, claro, así que pasamos página, empezamos de cero y con propósitos de la enmienda. Por cierto, la música es de L'Orfeo, de Claudio Monteverdi, cuando el protagonista vuelve a la Tracia, su casa, a sus queridos bosques y playas…

Las cosas que me han ocurrido las iré contando poco a poco, sin dilaciones, pero no de sopetón, que luego me quedo sin contenidos (vamos, que tampoco me han pasado muchas cosas)… Y sí, como dijo Milacasta, en Valladolid me hallaba, aunque ella contaba con información privilegiada, porque se sabía mis planes… La foto era de la catedral de Valladolid, que quedó a medioconstruir mientras iba engullendo los edificios que rodeaban su solar… En este caso, un convento románico, de ahí la mezcla de estilos… A mi se me hacía un poco a las termas de Caracalla, y pensé que sus iba a engañar,… bueno, a alguno si, a otros no… Mi intención es que pareciese Roma… (gracias, Álvaro, gracias, Laszlo, jajaja)… Y qué bueno Ace que no reveló el lugar a pesar de visitarlo… y qué fuerte, podíamos habernos visto, ¿no?...

Tengo que ponerme a pensar en que he de volver a escribir todos los días… Qué pereza después de 10 días de no publicar… En fin, esta tarde, en el trabajo, me dedicaré a pensarlo, y a ver cómo hago para leeros a todos, que tengo tarea retrasada, muy retrasada. Prometo no comentar a los post pasados, jajaja ;-)

Gracias por su atención, y por seguir visitando mi casa en mi ausencia. Las plantas siguen vivas. Yo también... aunque me duele la garganta y tengo fiebre.