Ayer, antes de que se estrene, que, por cierto, se estrena hoy mismo en loor de multitudes, fui a ver...
¿Que no sabéis qué obra es? Bueeeeno, ya sé que sois más de ópera y tal (jajaja), como yo, así que os lo explico de un rápido: Follies, de Stephen Sondheim, un musical de esos de toda la vida que nos cuenta la despedida y cierre de un teatro de varietés, como dicen las abuelas, y en el que se celebra una fiestecita de despedida con las viejas glorias, cada cual de una era, cada cual con su historia y su canción... No cuento más de la trama porque, aunque es sabida, como el final de El Señor de los Anillos (muere Frodo y se casa con Gandalf), no es plan de que os aburra con los detalles...
¡A lo que vamos, que me lo quitan de las manos! Ya, yaaaa sé que todo el mundo (que es una cosa de lo más paleta) sólo parece querer ver a Massiel, y la gente coge y aplaude nada más verla, que da una cosa como de show americano de los años 50. ¿Que como está? Pues aparentemente sobria, aunque la voz se le ha quedado un poco borracha, chica, pero le viene al papel que ni pintado. En el elenco principal tenemos a Vicky Peña y Carlos Hipólito (Phyllis y Ben) y a Muntsa Rius y Pep Molina (Sally y Buddy) y a sus correspondientes en jóvenes (Marta Capel, Diego Rodríguez, Julia Möller, Ángel Ruiz). Los adultos, muy correctos, en especial ellas, y los jóvenes mejores, por la cosa de la preparación vocal.
Yo sigo insistiendo en que en este país faltan actores-cantantes, no confundir con actores-que-cantan, pero bueno, la producción se deja escuchar bien... buena dirección musical, buena orquesta, no te ponen el
Me gustó la iluminación, la puesta en escena y el coro, aunque he de decir (si no lo digo reviento) que aunque se sea tan homosexual eso no se ha de notar desde el patio de butacas, y os aseguro que el aceite salpicaba hasta el paraíso y las plumas salían como dardos en los números de baile. Que seamos maricones en el escenario (bueno, y fuera) no hace que el pobre personaje lo sea también...
Mención especial a Asunción Balaguer que, con sus 86 añazos la tía, da en escena, baila y canta, canta, con poca voz, si, pero con una expresividad, unas ganas y una presencia que hace que, literalmente, el teatro se caiga en aplausos; mención a peluquería, que después de ver las fotos sin caracterizar, he flipado con las pelucas, que no lo parecen: hacen un trabajo de impresión.
Follies! de Stephen Sondheim se estrena hoy viernes en el Teatro Español, en cartel hasta el 8 de abril.
Y sí, sí conocéis alguna canción... ¿No recordáis a Liza Minelli y los Pet Shop Boys con su Losing my mind?
Pero, pero pero, pe... ¿lo de la Massiel es cierto??, pensaba que era de coña.
ResponderEliminarNo lo he leído porque... voy este finde :)
ResponderEliminarVamos el 2 de marzo. Tiene muy buena pinta.
ResponderEliminar!Joo¡ y los que vivimos en las afueras de Los Madriles (dicese Cantabria) a jodernos como siempre.
ResponderEliminar2 entradas en la misma semana, a ver Otto, tu quien eres y que has hecho con el Otto de verdad, juajuajua. Es broma, que se repita muchas semanas por favor.
Un besuco.
A.
Visto el domingo.
ResponderEliminarEl teatro entero chorreaba de aceite.
Lo de Asunción Balaguer, de impresión.
Infinitamente mejor que las murgas de la Gran Vía.
Y respecto a la pluma de los bailarines, los boys de revista siempre han sido boys de revista.
Pues yo voy a verla la semana que viene, que se van ya definitivamente y yo a una pandilla de señoras cantando no me podía perder...uff, qué ganas.
ResponderEliminarInteresante bloga, por cierto.