11 de abril de 2011

Publicidad

Mira, que paso hoy de ponerme superprofundo con el tema de maricas y bolleras... paso, pa-so...


Así que os pongo algo divertido de publicidad... que lo he visto en el Twitter y he pensado que para el lunes es muy resultón. El otro día estuvimos en El Escorial (de esto ya os hablaré, si eso) y luego nos fuimos a comprar cosas pasando por el McDonald´s... Yo el Burger King no lo piso porque no me mola naaada, y menos con esas campañas publicitarias tan patéticas que hacen con ese puto rey y la Lomana, que le han debido de forrar de billetes, porque vamos... A parte de que están muy malas, a mi gusto, claro...

McDonald's, además, siempre ha sido una empresa que ha gastado una pasta en obra social (escuelas, centros de formación...) y en apoyo de los Demócratas en EE.UU. (los buenos desde nuestra perspectiva europea, Obama..., vamos), además de que era una empresa familiar, que eso siempre gusta mucho... Muchos dicen que además son majísimos porque han contratado 50.000 personas en plena crisis, lo que no es que sea cosa de dadivosos o generosos o tal, es que la cosa está tan mal en EE.UU. que la gente ha dejado de ir a las cadenas de comida rápida más caras para volver a las de siempre, como McDonald's, en las que comes por 4 ó 5 dólares. Eso sí, NO soporto ese eslogan tan absurdo que usan en España del I'm loving it en vez de Me encanta, como en el resto de países, que han usado sus lenguas.. Que despidan al creativo de la agencia española YA.

¡Ay, qué rollo, si es que me pongo a hablar y no callo! Mira, no me entretengo más que me tengo que ir a comprar proteínas, nenas, que empieza la operación biquini... Besos y os dejo con lo bueno...




Vía Marketing Directo

6 de abril de 2011

Nosotros no quemamos...

Noticias de ataques indiscriminados a todo lo homosexual están a la orden del día... Ya fue aquella en el Teatro Nacional de Cataluña y su representación de Gang Bang en la que un legionario de Cristo (que es la misma imagen que pensar en un Cristo con dos pistolas, vamos) subió al escenario a agredir verbal y casi físicamente a los actores... Lo fuerte ya no es tanto que les joda la homosexualidad y nuestras diferentes realidades (que también existen en el mundo hetero, conste) sino que no distingan entre la realidad y la ficción...

Resulta que una puta tarada mental ha reproducido lo mismo en Washington el pasado viernes, con una mujer que atacó un cuadro de Gauguin por ser demasiado homosexual... Este:


Si, la tarada usó argumentos tan convincentes como que Gauguin es el mal, que representa la desnudez y eso es malo para los niños y que dos tías tan juntas en cosa homosexuala y mala... no sé si esta enferma está proyectando sus frustraciones o qué... Dijo, además, que tenían que quemar el cuadro... Supongo que ella ya tendrá su seta brulé, porque ella también tiene seta, y para ella será hasta pecado vérsela...

La pintura, valorada en 80 millones de dólares, no sufrió daños, por cierto...

¿Y si nosotros hicieramos los mismo? ¿Y si entrásemos, como el legionario de Cristo, en plena homilía a insultar al cura y a tirarle una silla? ¿Y si nos dedicamos a quemar cristos porque son una apología del martirio y del dolor? ¿Y si prendemos fuego a las iglesias? Pues no, porque sería absurdo y porque la lección que hemos aprendido es que nosotros no somos así y además hemos aprendido a respetar incluso a los que no nos respetan... claro, que eso no incluye a Mariano, que piensa que no tenemos los mismos derechos que un heterosexual...

Amén.

Vía Tetu

5 de abril de 2011

Rajoy ni en bandeja

Ayer, cuando me desperté, escuché que iban a entrevistar en la SER a Mariano Rajoy, líder de la oposición de este país. He de admitir que en seguida pensé que debía escucharlo, porque sabía que Gemma Nierga le iba a preguntar sobre el matrimonio homosexual...



Me fui al gimnasio, como tiene por costumbre mi vigorexia, que me arrastra a diario a ese lugar de sufrimiento, y pensé que, ya que iba a sufrir, mejor lo hacia en mi beneficio y el de mi cuerpo y evitaba lo que suponía que iba a decir el lidereso y que seguro que no sólo iba a ser lo mismo de siempre (o, como diría Felipe González, la misma mierda) sino que además lo iba a decir con ese tonillo de suficiencia que lo caracteriza, claro...

Al llegar a casa, leí lo que esperaba, claro... Este señor, al que ya le ha sacado del armario uno de sus compañeros de partido, tiene la poca vergüenza de volver a reírse en la cara de los homosexuales de este país. Ya, ya se que diréis que es peor el cómo se ríe de los españoles Zapatero o Rubalcaba con la crisis o el terrorismo, pero mira, metido ya en la mierda de la crisis (de la que no es culpable ni uno ni otro, pese a quien pese... que otra cosa en su gestión y de eso no estoy aquí para hablarlo) o del terrorismo (que no se puede usar como arma para hacer política) yo, hoy y casi a diario, pienso en mi identidad y en mis derechos y deberes como ciudadano, lo que me viene muy bien ahora que, además, comienza la campaña de Hacienda y yo he dar cuentas como el que más.

Me voy por las ramas. Como ciudadano, homosexual o no, he de pagar impuestos porque la sociedad en la que vivimos y la administración que la controla los necesita para garantizar el buen funcionamiento de la misma, ¿no? Supongo que eso me da derecho a disfrutar de mis derechos como ciudadano, ¿no?

Preguntado sobre su posición ante la ley de matrimonio homosexual, Rajoy ha respondido que han interpuesto un recurso ante el Tribunal Constitucional, o sea, que no está de acuerdo con que nos casemos y que ese derecho tenga el mismo nombre lo ejerza quien lo ejerza... Preguntado sobre qué haría si el Tribunal lo avalase como un derecho legítimo el señor Rajoy ha dicho que no tiene cerrada su posición, es decir, que no está de acuerdo con que nos casemos y que ese derecho tenga el mismo nombre lo ejerza quien lo ejerza...

Señor Rajoy, ¿y si yo no pago mis impuestos porque quiero que tengan un nombre más, digamos, rosa? Puede que tenga que taparme la nariz cuando ejerza mi derecho al voto, pero prefiero votar, a pesar de la coyuntura económica, etc, al partido que garantizó mi igualdad ante la ley por ser homosexual que a Ud., que sigue en sus trece de discriminarme por mi orientación sexual en pleno siglo XX... Ah, no... XXI.

¡Joder, pero si hoy es mi cumpleaños!

LEAMOS, AMIGAS